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Las mascotas son grandes protagonistas en la vida de quienes las tienen y cada vez son más los que quieren compartir sus viajes con sus amigos de cuatro patas. Es posible hacerlo -salvando algunos casos con restricciones- si se siguen los procedimientos y reglamentos de las compañías aeronáuticas.
Los criterios son variados y dependen tanto de las empresas como de los destinos y el peso del animal. La recomendación es que cada vez que se viaja con una mascota, además de las normas generales, que informamos a continuación, se consulte puntualmente y con exactitud los requerimientos, que son varios.
Los animales pueden transportarse en la bodega del avión o en cabina (junto a la persona) dependiendo, en primer lugar, de su tamaño/peso.
En bodega
No muchas personas quieren dejar a su mascota viajando sola en la bodega del avión, pero en algunos casos es esa opción o dejarlo en tierra. En este caso será fundamental el soporte en el que viaje el animal, que debe ser de un material resistente, seguro y con un buen cierre, ventilación y fondo impermeable. La distancia entre la cabeza del animal y el techo de la jaula (kennel) debe ser de 5 cm como mínimo (estando de pie), el ancho debe ser el doble del ancho del animal, y su largo le debe permitir permanecer acostado sin tocar las paredes. Las medidas máximas permitidas de su contenedor son de 115 cm de alto y no deberá superar los 300 cm lineales (ancho + alto + largo).
El transporte tiene costo y dependerá de si existe lugar en la bodega en todos los tramos de viaje. El importe a abonar dependerá del destino al que se viaje, de la aerolínea y en general se abona directamente en el aeropuerto.
En la mayoría de los casos la exigencia es que el animal sea mayor a 8 semanas de edad y se debe portar un certificado de salud emitido por un veterinario. Otro requisito que en general se pide es que el check in en el aeropuerto se realice unas 4 horas antes de la salida del vuelo, y que se avise a la aerolínea 48 horas antes del viaje de manera telefónica (aunque ya esté avisado por el agente de viajes o por el propio pasajero); cuando se realice el llamado se deben tener a mano los siguientes datos: edad, peso, dimensiones y raza.
En cabina
El animal puede viajar en cabina con su dueño si no supera los 8 Kg. de peso (incluyendo el soporte en el que se transporta); las medidas máximas del recipiente deben ser de 45 cm. de largo, 35 cm. de ancho y 25 cm. de alto (y en las aerolíneas norteamericanas son incluso unos 2 cm menos por ancho, largo y alto), y siempre que la suma de estas tres dimensiones no exceda los 105 cm. Debe ser seguro, ventilado y con fondo impermeable. Además, el animal deberá permanecer dentro del recipiente durante todo el viaje, y no se podrán colocar en las salidas de emergencia.
El cargo es menor que el transporte en bodega y se abona generalmente en el aeropuerto. Es importante tener un certificado de salud del animal y considerar que el mismo no obstaculice el descanso del resto de las personas que viajan en el avión.
Para viajar en cabina es importante también asesorarse en cada caso específico antes del día del viaje, y cumplir al pie de la letra la normativa que se indique, para así evitar problemas al momento del check in.
Cada aerolínea
Conocé la normativa de cada una de las compañías aéreas con las que trabajamos en PuenteAéreo. Recordá que este artículo es solamente orientativo y está actualizado al 04/04/18. Te sugerimos siempre chequear las condiciones de viaje con mascotas en la página web de la compañía aérea con la que viajes.
